Me llamo Giulia y soy terapeuta manual.
Mi camino en el mundo de la sanación comenzó en 2012, guiado por una profunda vocación: ayudar a las personas a reconectar con su bienestar físico, emocional y energético.
A lo largo de los años me he formado en diversas disciplinas: soy Master Reiki y tengo formación en shiatsu, quiromasaje, masaje deportivo, masaje metamórfico, técnicas de reequilibración energética (T.R.E.), moxibustión, ventosas, kinesiotaping, Ho’oponopono… Y también en terapia Gestalt, una experiencia transformadora que me ha enseñado el valor de la escucha profunda, la presencia auténtica, el respeto por los procesos del otro y la aceptación sin juicio.
Todo esto nutre mi forma de acompañar. No sigo un protocolo fijo: combino libre e intuitivamente lo aprendido para adaptarme a lo que cada persona necesita.
Cada sesión es una obra viva: una danza entre tu cuerpo y mis manos, guiada por la sensibilidad y la escucha activa. Me conmueve ver cómo el cuerpo habla —a través de tensiones, dolores, emociones retenidas— y cómo, cuando se siente escuchado, empieza a transformarse.
Sueño con seguir aprendiendo y expandiendo este camino que tanto me apasiona. Me interesan profundamente áreas como la medicina china, la acupuntura, la cultura hawaiana… Sé que este viaje no tiene fin.
Te acompaño desde el corazón, sin fórmulas, solo con presencia y entrega.
Porque cada cuerpo guarda una historia. Y escucharla es el primer paso para sanar.